El tiempo pasa y las generaciones cambian. En el mercado laboral lo que hoy se vive ya es muy distinto a lo que sucedía hace 20 años, mucho menos hace 50 años.
Hoy día, un ascenso, por prometedor que pueda parecer, no sólo implica un buen salario y buenos horarios, también debe conllevar un espacio sano que no afecte tu salud mental.
De hecho, en la actualidad, ya una proporción de trabajadores prioriza su bienestar por sobre una promoción en la empresa donde labora.
Según el estudio La revolución invisible de PageGroup, el 36% de las y los empleados en México no aceptaría un ascenso si considera que esto tendrá efectos negativos en su salud física y mental.
Es decir, 4 de cada 10 prefiere tener buena salud mental y física antes que aceptar una promoción laboral que pudiera poner en riesgo su bienestar.
Además, de acuerdo a la investigación, al menos 6 de cada 10 trabajadores mexicanos priorizan su salud mental y balance vida-trabajo por encima del éxito profesional, lo que refleja que los ascensos ya no son un atractivo de retención y atracción de talento por sí solos.
Y tú ¿estarías dispuesto a dejar pasar un ascenso laboral a costa de tu salud?