En julio, los ingresos tributarios (la recaudación de impuestos) ascendieron a 372 mil 424 millones de pesos (mdp), según los datos más recientes publicados por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
La cifra no fue menor: representó un aumento de 21.8% con respecto al mismo mes, pero del 2022.
Para dimensionar la cifra, esa cantidad de dinero es más de diez veces mayor al presupuesto de Aguascalientes.
Más allá de esta buena noticia, se dio a conocer también que entre enero y julio del 2023, los ingresos tributarios crecieron un 6.3% con relación a ese mismo periodo pero del año pasado.
Ese incremento hizo que durante esos siete meses en México se recaudaran 2.64 billones de pesos de impuestos.
Pero, a todo esto ¿en qué nos afecta o beneficia que el estado recaude más dinero?
Es a través de los impuestos que el estado mexicano -o en realidad, cualquier país- obtiene recursos para operar y garantizar que las personas puedan tener acceso, por ejemplo, a viviendas dignas, educación, salud, carreteras, calles y más.
Es decir, gracias a que existen los impuestos, el gobierno puede tener dinero para poder hacer más escuelas, carreteras, hospitales, así como para pagar los sueldos de las personas que trabajan ahí (maestros, médicos, enfermeros, personal de intendencia, etcétera).
La idea de los impuestos es que, a través de una aportación de la población, el estado gestione ese dinero para un mejor desarrollo de la sociedad. Es a través de los ingresos tributarios que también se obtiene capital para hacer grandes obras públicas, como aeropuertos, por ejemplo.
Para que ello funcione, el gobierno debe hacer una buena gestión de los recursos pero, además, se debe tratar de erradicar la corrupción para que ese dinero en realidad sí se esté usando en beneficio de la población y no se esté desviando.