A un músico le extirparon un tumor cerebral en Italia esta semana en una cirugía de nueve horas que pasó no solo despierto y completamente consciente, sino también tocando su saxofón. El paciente varón de 35 años se sometió el lunes a la intervención en el Hospital Internacional Paideia de Roma y fue dado de alta la madrugada del jueves.
El Dr. Christian Brogna, neurocirujano y experto en cirugía despierto, explica que el tumor se extirpó con éxito y que no hubo impactos negativos en el paciente. Brogna dirigió un equipo internacional altamente especializado de 10 miembros para el procedimiento, utilizando tecnología de punta.
El tumor estaba ubicado en un área muy, muy compleja del cerebro”, dijo Brogna. “Además, el paciente es zurdo. Esto hace que las cosas sean más complicadas porque las vías neuronales del cerebro son mucho más complicadas”.
El médico dijo que su paciente, que ha sido identificado solo como C.Z., tocó el tema musical de la película de 1970 “Love Story” y el himno nacional italiano en varios momentos durante la cirugía.
Durante la meticulosa preparación de la cirugía, C.Z. le había dicho al equipo médico que preservar su habilidad musical era esencial para él. También fue muy útil para el cirujano, porque su paciente tocando el saxo durante la cirugía le permitió a Brogna mapear diferentes funciones del cerebro mientras lo operaba.
Brogna, que ha realizado cientos de cirugías cerebrales despiertas, dijo que la clave para llevar a cabo una operación tan compleja era la preparación.
“Cada paciente es único, cada cerebro es único, por lo que realmente necesitamos conocer muy bien al paciente” afirma.
Durante un período de unos 10 días antes de la operación, el paciente se reunió con el equipo médico seis o siete veces. Dijo que era importante que los cirujanos respetaran los deseos del paciente en cuanto a qué funciones consideraban más importantes preservar. El proceso condujo a lo que Brogna llamó “una cirugía masivamente adaptada”.
Durante los preparativos para esta y cualquier otra cirugía cerebral, Brogna dijo que el equipo analiza a la persona en su totalidad, no solo la patología.
El período de preparación también asegura que el paciente conozca todos los detalles del procedimiento antes de que suceda. Durante la cirugía, esto ayuda a garantizar que permanezcan callados y colaborativos, sin miedo, dijo Brogna, y agregó que hay una atmósfera de “gran calma, gran silencio” en la sala de operaciones durante el procedimiento. Aparte del saxofón, claro, en este caso.
Brogna dijo sentirse orgulloso de que su paciente haya podido volver a su vida normal, y orgulloso de que con cada operación se avance en el conocimiento de esta rama de la medicina.
“Cada cirugía es una ventana al cerebro, a cómo funciona, y mientras aprendemos, tomamos en cuenta a la persona en su totalidad: su vida, su pasión, sus pasatiempos, su trabajo”, dijo el cirujano. “Ese es el objetivo”.
Con información de la BBC