Todos hemos sufrido por ese momento incómodo y desagradable, en el que las instituciones financieras llaman insistentemente y en ocasiones en horarios poco convenientes, con la única finalidad de vendernos alguno de sus productos o servicios. No importa si les pides de forma educada que ya no molesten, ellos ignoran tu petición y vuelven a marcar al cabo de unos cuantos días, pero ya tenemos una solución para este problema.

La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (CONDUSEF) cuenta con un sistema llamado Registro Público de Usuarios (REUS), que sirve para dejar de recibir llamadas comerciales de las instituciones bancarias y financieras, luego de que este organismo comprendiera que a veces estas empresas abusan de la información personas y de su privacidad.

Simplemente te tienes que registrar en el REUS y los bancos tendrán prohibido llamarte o escribirte. El alta es de 45 días naturales tras la fecha de inscripción, y tiene una vigencia de dos años. Lo mejor de esto es que el trámite es gratuito y si por alguna razón la empresa o banco sigue insistiendo, se puede notificar a la CONDUSEF tu inconformidad, y se pueda iniciar una sanción hacia la institución financiera por no respetar la privacidad del usuario.

Aquí te mostramos las tres maneras de inscribirse en el REUS:

• Personalmente. En cualquiera de las 36 subdelegaciones de Atención a Nivel Nacional. Para ello, deberás presentar una identificación oficial y un recibo telefónico.
• Por teléfono. En el Centro de Atención Telefónica, con una llamada al 01800 999 80 80 o al 53400 999 en la Ciudad de México. La CONDUSEF aclara que es importante realizar la llamada desde el número telefónico que se va a restringir (ya sea particular o laboral). De igual modo, tendrás que facilitar tus datos personales y la dirección de correo electrónico personal que deseas bloquear.
• Por Internet. A través del sitio web www.condusef.gob.mx, por medio del cual deberás facilitar los siguientes datos: dos números telefónicos particulares (uno fijo y otro móvil); dos números telefónicos laborables (uno fijo y otro móvil), y un correo electrónico particular y/o laboral.

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