Qatar se prepara para el auge del turismo que supone la Copa Mundial, una labor que exige recibir a más de un millón de fanáticos del fútbol. El problema es que muchos de estos turistas no pueden o no quieren quedarse en Qatar, debido a la falta de alojamiento y la baja tolerancia al alcohol y las fiestas en la conservadora nación musulmana significa que decenas de miles de fanáticos se concentrarán en los países vecinos para el torneo que durará un mes. Lo anterior significa que los vuelos el día del partido desde las principales ciudades de Medio Oriente transportarán a los espectadores a los juegos, en una dinámica que beneficiará a las aerolíneas, hoteles y lugares cercanos a Qatar, como los Emiratos Árabes Unidos (EAU), Arabia Saudita y Omán.
Dubái será el centro turístico que más se beneficiará con la Copa del Mundo. De los más de 90 nuevos vuelos que aterrizarán cada día en la ciudad anfitriona, Doha, unos 40 partirán desde EAU. De hecho, se construyó un nuevo hotel sobre una isla artificial con forma de palmera y que estará reservado para las y los huéspedes que planean establecer su base en Dubái y tomar el vuelo de 40 minutos a Doha con procedimientos de inmigración simplificados. En otras palabras, Dubái será la principal puerta de entrada a la Copa del Mundo, de ahí que probablemente recibirá a más personas incluso que Qatar
Qatar se ha estado preparando para albergar la Copa durante 12 años y estima que la afluencia de 1,2 millones de visitantes agregará $17 mil millones de dólares a su economía. En medio de preocupaciones por una crisis de alojamiento, los organizadores alquilaron dos cruceros y armarán más de 1,000 tiendas de campaña en el desierto. Un servicio de transporte regional conectará Doha con otras ciudades, como Muscat, Riyadh, Jeddah y la ciudad de Kuwait.
Arabia Saudita y Omán están organizando festivales para atraer a los fanáticos y planean agilizar los procedimientos de viaje. La Autoridad de Turismo de Arabia Saudita dice que espera un aumento significativo de visitantes relacionados con la Copa del Mundo, y aquellos registrados para la tarjeta de fanático de Hayya de Qatar pueden solicitar visas de entrada múltiple al reino.
Mientras tanto, el Ministerio de Patrimonio y Turismo de Omán dice que el torneo “aumentará el perfil de muchos destinos regionales” y tendrá un impacto económico mucho más allá del evento.
Por otro lado, no es solo la escasez de alojamiento lo que lleva a los fanáticos a buscar en otra parte. Los códigos de vestimenta locales que requieren que hombres y mujeres cubran sus cuerpos desde los hombros hasta las rodillas en muchos espacios públicos y las estrictas reglas sobre el consumo de alcohol no hacen de Qatar el destino ideal para algunos.
Dubai parece una mejor opción para las y los fanáticos del balompié, a quienes les gusta divertirse mucho, de ahí que haya muchas dudas sobre el hospedaje de Qatar para disfrutar de la Copa del Mundo. En suma, Dubai ofrece alojamiento a precios más accesibles, habitaciones disponibles en cadenas de confianza y la percepción de que habrá un enfoque más indulgente con el alcohol impulsa a muchas personas a elegir Dubái en lugar de Doha.
Ante este escenario, existe la posibilidad de que el patrocinador principal de la Copa del Mundo, Anheuser-Busch InBev NV puede persuadir a las autoridades de Qatar para que permitan a los fanáticos beber cerveza Budweiser en los estadios, una batalla que enfrentó en la Copa del Mundo de 2014 en Brasil y que logró ganar.
El Comité Supremo de Entrega y Legado de Qatar prometió que habrá alcohol disponible en algunas “zonas de fanáticos” designadas fuera de los estadios y otros lugares de hospitalidad, y se anunciarán más detalles a su debido tiempo.
Mientras tanto, surgirán zonas de fanáticos en Dubái, incluido el NH Dubai The Palm, donde la agencia de viajes Expat Sport ofrece paquetes que incluyen vuelos a Qatar y un bar deportivo en el lugar para ver los partidos. La agencia espera llegar a 5 mil ocupantes y ha tomado habitaciones en otros hoteles para satisfacer a una mayor demanda.
El período más ocupado para Qatar será la fase de grupos, cuando se jugarán cuatro partidos por día en los estadios de Doha y sus alrededores. Dos de los lugares están a solo 10 minutos en automóvil, mientras que el más lejano está a solo una hora de distancia. Eso hace que el evento sea más compacto que las 21 Copas del Mundo que lo precedieron. Rusia, que fue sede del último torneo, tenía estadios repartidos en 11 ciudades, mientras que Brasil celebró partidos en 12 ciudades. Para la Copa del Mundo de 2026, México, Canadá y EE. UU. compartirán las responsabilidades como anfitriones.