Siete marcas de moda se cuelan entre las 100 más valiosas del mundo, según el reciente ranking Kantar BrandZ Top 100 Most Valuable Global Brands 2024. Louis Vuitton, Hermès, Nike, Chanel, Gucci, Lululemon y Zara se han posicionado en este selecto grupo, consolidando su influencia global a pesar de los desafíos actuales en la industria.
En el ranking general, Apple se consolida como la marca más relevante del mundo, según el informe, que analiza tanto datos financieros como la opinión de los consumidores para establecer un ránking. La firma tecnológica vuelve a ser un año más la más valiosa, con un valor de un billón de dólares, tras crecer un 15 %.
Las otras cuatro marcas en el top 5 global no solo han mantenido sus posiciones respecto al año pasado, sino que también han visto un incremento en su valor. Google ocupa el segundo lugar, con un valor de 753,474 millones de dólares, creciendo un 30 %. Le sigue Microsoft, valorada en 712,883 millones de dólares, con un incremento del 42 %. Amazon se encuentra en la cuarta posición, con un coste de 576,622 millones de dólares, tras un crecimiento del 23 %, y McDonald ‘s cierra el top 5 con una valoración de 221,902 millones de dólares, un 16 % más que el año anterior. Otras marcas que completan el top ten incluyen a Nvidia, Visa, Facebook, Oracle y Tencent.
Entre los gigantes de la moda, Nike se posiciona en el puesto 27, aunque ha descendido seis posiciones en comparación con el año pasado, perdiendo un 4 % de su valor. Según el Índice FashionUnited, los ingresos netos de Nike para el trimestre que finalizó el 31 de mayo fueron de 1,500 millones de dólares, lo que representa un aumento del 45 % respecto al mismo periodo del año anterior. Sin embargo, la empresa también registró una caída en sus ventas, que se situaron en 12,610 millones de dólares.
Por su parte, Zara, la cadena insignia de Inditex, subió 24 puestos, hasta ocupar la posición setenta, con un valor de 27.101 millones de dólares, un 47 % más. Gucci y Lululemon también figuran en el ranking en posiciones más bajas.
Las marcas de lujo siguen enfrentándose a un entorno desafiante, donde el comercio electrónico y las redes sociales están redefiniendo la interacción con los consumidores. Al mismo tiempo, el streetwear y el athleisure continúan ganando popularidad, obligando a las marcas tradicionales a adaptarse a estas nuevas tendencias para seguir siendo competitivas en un mercado global en constante evolución.