Septiembre | 2021
Por Joaquín Cruz Lamas
¿Conoce usted la obra de Miguel Cabrera? Es más: ¿Sabe usted quién es Miguel Cabrera? Algunos de mis lectores sí lo sabrán, pero estoy seguro de que la mayoría no. ¿Cómo lo sé? Porque nadie nunca nos habló de él, o si lo hicieron, fue solo de pasada y muy rápido. Como una nota al pie en la larga historia nacional, más que como un personaje que vale pena ser visto por su obra; sin embargo, aunque la gente no sepa de quién se trata, muchos han visto su obra en repetidas ocasiones. Muchos incluso llevan en este momento una reproducción de su cuadro más famoso en su billetera.
Les suelto la sopa. Miguel Cabrera fue un pintor de la época del México virreinal. Su obra más conocida es el retrato de Sor Juan Inés de la Cruz. Podemos encontrar obras suyas en varias de las iglesias más importantes del país, y también en algunos museos de México y del extranjero. Su arte fue de corte religioso principalmente.
A lo que voy es a que este autor, junto con otros genios del barroco novohispano, han sido cruelmente olvidados por el grueso de la población. De su existencia solo se enteran los que estudian Historia del Arte e Historia de México, pero no quienes tienen la educación proporcionada por el currículum oficial. Eso me parece tremendamente injusto, no solo con los artistas olvidados, sino también con todas las personas que son mantenidas deliberadamente en la sombra.
Hemos aprendido sobre los grandes genios del renacimiento y el barroco europeo, lo cual está muy bien. Se entiende que conocer la obra de Velázquez, Goya, el Greco, Caravaggio, Miguel Ángel, Rafael, Rubens, etc., es necesario para tener eso que llamamos “mundo” o “cultura general.” Pero nos olvidamos por completo de los artistas locales. Créanme, apreciada audiencia, no es mi afán ser nacionalista, pero me parece que puede levantar mucho el ánimo nacional estar al tanto del talento que aquí se ha cultivado. Les dejo algunos nombres para que, si gustan, consulten sus obras en internet y se maravillen con su destreza y pericia: Miguel Cabrera (por supuesto), Juan Correa, Cristóbal de Villalpando, Baltazar de Echave Ibía, José de Ibarra, Juan Rodríguez Juárez y José Juárez (o Xuárez).
De este modo, la próxima vez que alguien le diga que en México no sucedió nada durante los 300 años de virreinato, usted tendrá las credenciales para soltarle un bofetón (solo intelectual) a su interlocutor y mostrarle lo contrario. Esto que he mencionado aquí se refiere solo a algunos artistas visuales (pintores) y no agota de ninguna manera todo nuestro acervo artístico, es decir, hay mucho más para mostrar todavía.