De acuerdo a la agencia de noticias AdAge, los anuncios por tan sólo 30 segundos en el próximo Super Bowl LVII, a llevarse a cabo el domingo 12 de febrero, costarán hasta siete millones de dólares en Estados Unidos.
Para dimensionar, dicha cantidad equivale a más de 132 millones de pesos y es más alta, por ejemplo, que los presupuestos enteros con los que operan municipios pequeños a lo largo y ancho de México.
Esta edición del acostumbrado partido tendrá como contendientes a los Philadelphia Eagles y a los Kansas City Chiefs, y se llevará a cabo en el State Farm Stadium de Glendale, Arizona.
Con esos precios ya difundidos, se supo también que en esta ocasión los comerciales para el magnoevento, que tendrá a Rihanna en su show de medio tiempo, han sido los más caros registrados en la historia.
El año pasado el costo de medio minuto fue de aproximadamente 6.5 millones de dólares.
Aún con estos precios, para esta ocasión Fox Corp ya logró vender cada uno de los espacios publicitarios disponibles en el juego entre los dos campeones, y se estima que se generen más de 500 millones de dólares tan sólo de pagos de publicidad.
Algunas de las marcas que se anunciarán durante el partido son Pepsi, Doritos, Pringles, Heineken y Booking.com