El Gobierno de México ha dado a conocer el primer autobús eléctrico completamente mexicano, denominado Taruk, que en lengua yaqui significa «correcaminos». Este autobús fue coproducido por las empresas nacionales DINA y MegaFlux, y representa un paso importante en la consolidación de México como líder en la industria de la electromovilidad. El anuncio se realizó en un evento organizado en la sede de la Secretaría de Economía, donde se otorgó oficialmente el sello Hecho en México a este innovador vehículo.
El Secretario de Economía, Marcelo Ebrard, destacó la coyuntura estratégica de este lanzamiento, que coincide con las negociaciones del Gobierno mexicano con la administración del presidente estadounidense Donald Trump, quien planea imponer aranceles a las importaciones de vehículos. Ebrard recordó que, en caso de que se concrete esta medida, los aranceles afectarán también a las empresas estadounidenses que exportan, dado que el Taruk es una marca mexicana, creada y desarrollada por empresas nacionales como DINA y MegaFlux.
«Si los estadounidenses imponen aranceles, estarán afectando a sus propias empresas que exportan, porque esta es una marca mexicana», afirmó Ebrard, refiriéndose a la relevancia de la industria automotriz mexicana en el contexto de América del Norte.
El Taruk no es solo un autobús eléctrico, sino un símbolo de la capacidad de México para innovar en sectores como la electromovilidad. Roberto Gottfried, director general de MegaFlux, señaló que el autobús fue diseñado, creado y patentado completamente en México, adaptándose a las necesidades del país y a sus rutas urbanas. «No fue tropicalizado, fue diseñado desde cero», destacó Gottfried, agregando que el proyecto no solo ofrece un vehículo, sino toda una cadena de valor nacional con soporte, repuestos y pagos en pesos.
El nuevo autobús eléctrico no solo es un avance tecnológico, sino también una oportunidad para mejorar el medio ambiente. Claudia Agatón Muñiz, presidenta municipal de Ensenada, Baja California, anunció que se implementará un sistema de transporte público utilizando unidades Taruk, lo que contribuirá al cuidado del medio ambiente y al impulso de la tecnología mexicana.
El Secretario de Movilidad del Estado de México, Daniel Sibaja González, también expresó su interés en incorporar el Taruk al sistema de transporte público en su entidad. «Este vehículo no es experimental, pronto lo verán en los sistemas de transporte público», afirmó Ebrard, quien subrayó que el objetivo es desarrollar las capacidades de innovación para beneficiar a la población.
El proyecto Taruk también recibió apoyo del Conacyt, la UNAM y el Instituto Politécnico Nacional, instituciones que han sido clave en el desarrollo y la investigación detrás de este innovador autobús eléctrico.
Altagracia Gómez, coordinadora del Consejo Asesor para el Desarrollo Económico Regional y Relocalización, destacó el papel fundamental de DINA y MegaFlux en este avance y recordó las alianzas históricas de la empresa DINA en México. «MegaFlux ya es una compañía mexicana al nivel de las grandes empresas internacionales», señaló Gómez, resaltando el impacto positivo que proyectos como Taruk tienen en la economía y la industria del país.
Con el Taruk, México no solo da un paso firme hacia la electromovilidad, sino que también reafirma su capacidad para crear e innovar en sectores clave, posicionándose como un actor clave en la industria automotriz a nivel global.