Por mucho tiempo se ha pensado, erróneamente, que al que más trabaja le va mejor. Sin embargo, esa es una aseveración que no tiene sustento y en la que se atraviesan factores mucho más complejos, como la desigualdad y la pobreza.
De hecho, México es la viva prueba de que trabajar más no asegura tener mejores resultados.
En la carrera de la productividad, México está muy atrasado. De acuerdo a datos del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) México se encuentra en el último lugar de producción por hora trabajada, pese a que es el país donde las personas trabajan más horas por año.
El IMCO utilizó datos de los 38 países que conforman a la Organización para la cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
Con base en la información de cada uno de esos países, se determinó que México es el país donde más se trabaja pero donde menos productividad hay, y eso se relaciona, además de a factores como la desigualdad, a que las personas no tienen un descanso adecuado que les permita desarrollarse.
Según el IMCO, estos son los tres países más productivos de la OCDE:
- Irlanda, con mil 657 horas trabajadas al año en promedio por persona
- Letnia, con mil 553 horas trabajadas al año en promedio por persona
- Rumania, con miil 808 horas trabajadas al año en promedio por persona
A diferencia de esos países, en México se calcula que al año las personas trabajan dos mil 226 horas, y además, muchas personas cuentan con al menos dos trabajos.