La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha declarado una emergencia de salud pública de importancia internacional debido a la expansión de una nueva variante más letal de la viruela del mono, rebautizada como mpox. Esta es la segunda vez que la OMS activa el máximo nivel de alerta para esta enfermedad bajo el Reglamento Sanitario Internacional, y la octava en toda su historia.
La decisión fue adoptada por unanimidad entre los miembros del Comité de Emergencia de la OMS. Según el director general del organismo, Tedros Adhanom Ghebreyesus, la aparición y rápida propagación de esta nueva variante en el este de la República Democrática del Congo (RDC), así como su presencia en países vecinos que no habían reportado casos anteriormente, plantea una grave preocupación. Ghebreyesus subrayó la necesidad de una respuesta internacional coordinada para contener los brotes y salvar vidas.
Dimie Ogoina, director del comité de emergencia, destacó que el brote actual es el más grave registrado hasta la fecha, con una expansión que afecta particularmente a poblaciones vulnerables como niños y mujeres embarazadas. Ogoina también advirtió sobre el riesgo de una mayor expansión internacional, justificando la declaración de emergencia para facilitar una acción global que mejore la vigilancia y la respuesta sanitaria.
Esta medida de la OMS llega apenas un día después de que los Centros Africanos para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC africanos) emitieran una alerta en el continente, registrando hasta ahora 15,000 casos y 461 muertes relacionadas con la mpox en 2024. El número de contagios detectados es significativamente mayor en comparación con el año anterior, y es probable que solo represente una fracción de los casos reales. La mayoría de los casos se concentran en la RDC, pero el virus ya se está extendiendo a países como Uganda, Kenia y Ruanda.
La nueva variante de mpox, que se diferencia del clado que provocó la alerta internacional en 2022, parece ser más letal, con una tasa de mortalidad de alrededor del 3% en África. Los niveles de diagnóstico en el continente son insuficientes y las capacidades sanitarias son limitadas en comparación con los países desarrollados.
Mientras el primer clado de mpox se transmitía principalmente a través de relaciones sexuales íntimas, los mecanismos específicos de transmisión de esta nueva variante aún no están completamente claros, aunque parece ser más contagiosa y severa. En el brote actual en la RDC, los niños son los más afectados, con un 70 % de los casos en menores de 15 años y un 39 % en menores de cinco años, quienes registran un 62 % de las muertes.
La declaración de emergencia no impone obligaciones a los países, pero permite una coordinación internacional más efectiva, agiliza la compra de vacunas y facilita la omisión de algunos procesos burocráticos. Madhu Pai, de la escuela de salud global McGill, ha señalado que se necesitan 10 millones de dosis en África, mientras que solo hay disponibles unas 200,000.
Tim Nguyen, director de la Unidad de Eventos de Alto Impacto en la Preparación y Prevención de Pandemias de la OMS, informó que están en contacto con fabricantes de vacunas que tienen reservas limitadas, con proyecciones para producir más dosis a finales de año y en 2025. Además, la OMS está gestionando donaciones de países con reservas.
Maria Van Kerkhove, del programa de Emergencias de la OMS, enfatizó la necesidad de comprender mejor la epidemiología del virus para enfocar adecuadamente las vacunas en las poblaciones en mayor riesgo. Aunque las vacunas son cruciales, también es esencial trabajar estrechamente con las comunidades para detener la transmisión.
En Occidente, las campañas de vacunación y la información a grupos de riesgo fueron clave para controlar la mpox. En España, el Ministerio de Sanidad reportó 40,610 personas inmunizadas, pero solo la mitad ha recibido la segunda dosis. Desde abril de 2022, se han comunicado 8,100 casos de mpox en España, con 260 casos notificados en 2024.
El Centro Europeo de Control de Enfermedades (ECDC) ha evaluado el riesgo de la nueva variante en Europa como “muy bajo”. Pamela Rendi-Wagner, directora del ECDC, señaló que, aunque el riesgo para la población europea es bajo, el organismo está colaborando con socios en África para contener el brote y fortalecer la preparación para futuras emergencias. El ECDC publicará una nueva evaluación del riesgo en los próximos días.