En diciembre, se aprobó en la Cámara de Diputados una iniciativa que aumenta de cinco a veinte días el permiso de paternidad con goce de sueldo.
La reforma se avaló con 409 votos a favor, uno en contra y dos abstenciones. Ahora, esta fue enviada al Senado para continuar con su aprobación -es decir, aún no es ley-.
Actualmente, la ley sólamente prevé un permiso de paternidad de cinco días con goce de sueldo, y no existe una licencia de paternidad similar a la licencia de maternidad que les dan a las mujeres después de tener un hijo.
Cabe mencionar que el permiso de paternidad es distinto a la licencia, pues con la licencia, es el estado quien se encarga de hacer los pagos a las madres, y con el permiso, es el patrón quien se encarga de garantizar el sueldo al papá.
La iniciativa aprobada argumenta que son obligaciones de los patrones otorgar permiso de paternidad de 20 días laborables con goce de sueldo a los hombres trabajadores.
Estos 20 días serán contados a partir del nacimiento de sus hijos y aplicaría también para casos de adopción.
Además, la reforma contempla que, si hay complicaciones posteriores al parto que perjudiquen a la madre o al recién nacido, el permiso podrá extenderse hasta treinta días.
Este tipo de permisos son un avance en materia de perspectiva de género, pues ayuda a que los hombres se relacionen más con sus hijos desde su primera etapa de vida, además, ayuda a equilibrar las labores domésticas y de cuidado, de tal manera que estas ya no sólo recaigan en la mujer.
Si bien lo que se busca es llegar a una licencia de paternidad igual de amplia que la de maternidad, el permiso de paternidad -aún pendiente en el Senado de la República- sí ayuda a equilibrar al menos un poco más la responsabilidad de crianza.