De nuevo, la inflación en México se desinfló un poco, desacelerándose y acercándose cada vez más a la meta que el Banco de México (Banxico) estableció, de acuerdo con los últimos datos divulgados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Con la última información revelada por el Inegi, se calculó que la inflación vivió su sexto mes consecutivo de desaceleraciones, así como su menor nivel desde marzo del 2021 –hace ya más de dos años-, cuando los precios al consumidor aumentaron 4.67%.
Con base en los últimos datos publicados por el Inegi, la asociación México, ¿cómo vamos? estimó que durante el séptimo mes del 2023 la tasa anual de inflación fue de 4.79%
Dicha cifra es menor con respecto a julio, el mes más próximo al anterior, cuando fue de 5.06%.
¿Qué es la inflación y por qué nos importa?
Según México, ¿cómo vamos? , la inflación es “el aumento sostenido y generalizado de los precios de bienes y servicios de una economía en un periodo determinado”.
En realidad, la inflación en nuestro país “se mide a partir del cambio en los precios de una canasta de 299 bienes y servicios genéricos que representan el consumo de las familias mexicanas e integran el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC)”.
Y esto es importante porque los cambios en los precios de la canasta básica implican una consecuencia en la capacidad de compra de la población.
De hecho, la organización advierte que “una inflación controlada permite mantener el poder adquisitivo de los individuos al mismo tiempo que incentiva la producción de bienes”, y es por eso que si la inflación llega a niveles adecuados, las personas en realidad tienen una mejor capacidad adquisitiva para tener mejores condiciones.
La inflación está relacionada, por ejemplo, al incremento o decremento en el precio de productos como la cebolla, limón, carne de res, pollo y aceites, entre otros. Pero también la inflación está detrás de los cambios en los costos de servicios turísticos, de viajes aéreos, de casas y de automóviles.