Nota Web | Febrero | 2022
Por Joaquín Cruz Lamas
Antes de que respondas a la pregunta, piénsalo cuidadosamente. Algunas personas seguramente dirían que sí, ya que es fácil asumir que nuestros amigos nos quieren incondicionalmente. Quizá no les falta razón, muchas personas tenemos la bendición de tener grandes amigos verdaderos. Pero quizá otros se sienten inseguros sobre el modo en que tratan a sus amigos, o sobre la autenticidad de las relaciones de amistad que tienen. Es normal. Si esto te ha llegado a suceder, no hay nada de qué preocuparse.
En primer lugar, si dudamos de nuestros amigos, quizá lo mejor sea sentarnos a pensar quiénes son aquellas personas en las que verdaderamente confiamos, lo más seguro es que encontremos al menos a dos o tres amigos verdaderos. Por otro lado, si tenemos dudas sobre el modo en que tratamos a nuestros amigos, entonces vamos en el camino de algunos de los grandes pensadores del pasado. La regla de oro de la ética, que está presente en muchos sistemas de pensamiento e incluso en muchas religiones, es la siguiente: trata a los demás como te gustaría que te trataran. Las primeras personas con las que ponemos esto en práctica es con aquellas más cercanas a nosotros, quizá principalmente con los amigos.
El preguntarnos si seríamos amigos de nosotros mismos va por ese camino. Es otra forma de redactar la pregunta: ¿me gustaría ser tratado como trato a los demás? El objetivo no es causar inseguridades y dudas, sino que tratemos de ser más comprensivos y amables con aquellos que nos rodean. Quizá nos demos cuenta de que estamos dando por sentando a alguien en nuestra vida, o que fuimos un poco groseros con alguno de nuestros amigos. Con este simple ejercicio seremos más conscientes de nuestras acciones y del modo en que tratamos a los demás.