Dime dónde naciste y te diré cuánto vivirás… Sí, aunque suene exagerado, más que la genética, el Código Postal de donde naces y creces influye en tus oportunidades, expectativas, calidad y esperanza de vida.
Según el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el Código Postal importa más que el genético al momento de calcular la esperanza de vida de una persona, y eso es así porque finalmente la ciudad o región en donde vives puede representar un riesgo, en mayor o menor medida, para tu vida.
Además, la región donde naces y creces también está directamente relacionada con las oportunidades y derechos a los que puedes tener según la clase social de donde vivas, finalmente, las oportunidades no son las mismas para una familia de clase alta que vive sin problemas de abasto de agua o sin educación, al de una familia en condición de pobreza, cuyo acceso a servicios básicos o a alimentación está limitado.
Lo anterior lo abordó el BID a través de su investigación documental “Salud y Ciudad: tu código postal importa más que tu código genético”, donde básicamente se evidencia que no es lo mismo vivir en una zona marginada a en una zona llena de privilegios.
En una región con carencias la esperanza de vida puede ser de 70 años, mientras que en una donde no se tengan problemáticas sociales de estado, puede ser de hasta 85, es decir, hay 15 años de diferencia entre una y otra.
Finalmente, esta diferencia está directamente relacionada con la desigualdad socioeconómica, y no es coincidencia que el documental recorra diversas ciudades y países de América Latina y el Caribe, donde se encuentran ocho de los 20 países con mayor desigualdad del mundo.
Más allá de criticar, el cortometraje realizado por sociólogos, epidemiólogos y especialistas en urbanismo reflexiona sobre la necesidad de que las políticas de planificación urbana favorezcan la construcción de vínculos comunitarios y tengan un impacto positivo en el bienestar ciudadano por igual, y no sólo para ciertas zonas o códigos postales.