Con dos sucursales ya en funcionamiento, en el 2018 la diseñadora egresada de la Universidad Autónoma de Aguascalientes (UAA), Sonia López Santamaría, decidió explorar el camino del emprendedurismo con Esticker Print Boutique, un centro de impresión digital que además busca ser un espacio cómodo y acogedor para las personas que lo visitan entre tanta premura y prisa.
Las personas que estudian diseño o que tienen una marca e invierten en su imagen podrán coincidir en algo: por lo regular los lugares de impresión no son amenos, tienden a sentirse atareados y tensos y, en la mayoría de los casos, el servicio no es cálido ni ameno.
Esticker, es todo lo contrario a eso. El concepto de este emprendimiento es, por una parte, sí ser un negocio que brinde impresiones de calidad y con eficiencia, pero por el otro, ser un lugar lleno de colores, ordenado y cómodo que justo le dé a los clientes la sensación de no estar en un ambiente de tensión y premura.
“La idea era crear un lugar donde las personas pudieran ir a imprimir, pero que este fuera en realidad un espacio amable y alegre”, cuenta Sonia, porque ella misma, cuando fue estudiante vivió en carne propia esa falta de atención en los comercios de impresión apresurados.
Pero la historia de Esticker no sería la misma de no ser por su equipo integrado sólo por mujeres, mujeres como Angie, quien desde un principio acompañó a Sonia en esta historia de diseño, negocios y emprendedurismo. También para esta entrevista con Blackstone Magazine, Angie, quien conoció en la carrera de Diseño Gráfico a Sonia, complementa sobre la visión de Esticker por sobre los otros negocios que tienen el mismo giro: “por eso abrimos un lugar que fuera eficiente, rápido y donde te atendieran bien y que fuera, sencillamente, bonito”.
Actualmente Esticker cuenta con dos sucursales: una está especializada para todo el tema de artes gráficas, impresión digital comercial y empresarial; ahí, por ejemplo, las y los empresarios y emprendedores pueden ir a imprimir sus menús, sus invitaciones para eventos, sus fotografías de eventos, fotografías de familia, tarjetas de presentación, etcétera.
En cambio, en la segunda sucursal se especializan en brindar servicio de impresión de objetos para eventos especiales, como bodas. Este segundo giro surgió gracias a la tendencia que se ha dado últimamente de personalizar, por ejemplo, vasos y termos para bodas o graduaciones, o incluso los stickers personalizados.
De hecho, cuenta Sonia, que esta segunda sucursal donde se encarga de todos los eventos destaca justo por la personalización y la atención que se le da a las y los clientes. “Contamos con un catálogo, pero todo va personalizado, porque al tratarse de eventos especiales, eso busca la gente”, explica la joven emprendedora.
Con toda esta tendencia de personalización de eventos, el servicio más solicitado en la actualidad es imprimir en los cilindros de las bodas las caras de los novios, sus apodos, sus perritos y cosas más personales. Incluso, hay personas que deciden hacer stickers para compartirlos con sus personas queridas.
Más allá de Aguascalientes
Al igual que todo, un emprendimiento es un proceso que lleva tiempo. Así empezó Esticker, llevando poco a poco su proceso pero entendiendo que todo tenía un fin común: crecer y dar el mejor servicio.
Sonia y Angie cuentan que antes de la pandemia la tienda empezó a posicionarse en el estado, pero el gran giro se dio hasta después de que se retomó la normalidad. “Empezamos a tener más gente después, cuando regresamos de pandemia, a principios del 2021. Ya para mediados de ese año la demanda había aumentado mucho, ya no cabíamos y fue así como decidimos abrir la segunda sucursal”, comparte Sonia.
Desde entonces, el desarrollo de la empresa se ha ido dando de manera natural y hoy es tal su impacto, que no sólo tienen clientes de comercios o emprendimientos locales, sino también de otros lugares de México, teniendo envíos nacionales cada semana.
Por supuesto, el camino no es sencillo. Desde siempre se han tenido retos y todo implicó “tener mucha paciencia. Nosotras abrimos en diciembre del 2018 y después llega la pandemia. Ahí, por ejemplo, nos estancamos. Luego vino el boom de Instagram y ahí vimos una oportunidad”, complementa Sonia. Hoy día, Esticker tiene casi 30 mil seguidores tan sólo en esa red social, y es gracias a eso, y al equipo y a las ideas creativas detrás, que se ha logrado llegar a más y más personas, tanto local como nacionalmente.
Las redes sociales, agrega, son a veces imprescindibles y requieren de un trabajo constante, trabajo que se han comprometido a sacar adelante: “para estar presente en redes es, simplemente, 24/7. Si ya va a salir el producto, no se te tiene que olvidar que debes grabar porque tienes que subir contenido. A veces uno cree que a un video le puede ir bien, y en realidad le va mal, y otros de los que no esperabas mucho, sí tiene un buen alcance. Entonces, sí es algo de estar viendo qué funciona, qué no, y estar siempre presente y persistente”.
El equipo de Esticker destaca no sólo por la calidad que ofrecen, sino también por estar conformado por puras mujeres, quienes han logrado continuar con la idea que se tenía del proyecto: ser un lugar eficiente, ameno, cómodo y distinguido por su diseño interno, pero también por su labor. Esticker es un claro ejemplo de que los emprendimientos pueden empezar gracias a vivencias y experiencias. Y de ahí se puede empezar el camino al éxito.