Actualmente el software más famoso de Inteligencia Artificial (IA) en el mundo es Chat GPT, a partir del cual se han generado textos periodísticos ya publicados formalmente en medios de comunicación, o a partir del cual se han compuesto canciones.
En realidad, la IA está cada vez más presente en el día a día. Lo está en los sistemas operativos: se llama Siri, o Alexa, o incluso también está detrás de algunos chats de asistencia para servicio al cliente.
Aún así, aunque algunas personas pueden decir que resultan como una herramienta útil, también hay quienes desconfían y tienen miedo al respecto, e incluso, el fundador de Chat GPT, Sam Altman, considera que sí es importante que los gobiernos regulen el desarrollo y el uso de las IA.
En una comparecencia ante un subcomité del Senado de los Estados Unidos, Altman hizo un listado de las aplicaciones beneficiosas de la tecnología, desde la medicina hasta la lucha contra la crisis climática, para evidenciar que la IA puede ser utilizada en beneficio para la humanidad.
Sin embargo, en esa misma intervención también reconoció que existen riesgos: “Creemos que los beneficios de las herramientas que hemos desarrollado hasta ahora superan ampliamente los riesgos”, mencionó Sam Altman, actualmente director operativo de Chat GPT.
Si bien todavía no existe la suficiente evidencia como para saber qué efectos podría tener la IA en la sociedad, uno de los que más se teme es que termine por suplir al factor humano en los empleos.